"Fuga de Cerebros" es una comedia a la española que es un pequeño guiño a comedias americanas del estilo "American Pie" o la ochentera "Porkys".
La protagonizan un elenco de actores que proceden su mayoría de series televisivas de cierto éxito como la guapa Amaia Salamanca (la Cata de "Sin tetas...") y Mario Casas ("Física y Química"...).
Menos mal que esta película la he visto, aunque de baja calidad, por cortesía de la mula porque sería una lástima gastarse 6 euros en el cine para verla. La película es mala de cojones y la verdad es que no sé si me estoy haciendo mayor, pero las bromas que hacen no me parecen nada divertidas. Para más males dicen que se van a Oxford y han sido tan cretinos que han rodado en Madrid y Gijón en vez de mudarse hasta aquí. No creo que cueste tan caro rodar en Oxford. Tienen el precedente del año pasado de Alex de la Iglesia que lo hizo y no creo que costase tanto.
Es el acertado debut en la dirección de Fernando González Molina que ha reventado las taquillas españolas. Mario Casas ha hecho doblete estos meses con la película de Albacete-Menkes y ésta, demostrando que es una de las jóvenes promesas del cine español.
Tenemos humor del malo en una película hecha con palitos y cañicas que bien podría ser el episodio piloto de una nueva serie de Antena 3. La salvan, para mi gusto, pequeñas intervenciones como la de Loles León, en su tónica habitual de verdulera.
La protagonizan un elenco de actores que proceden su mayoría de series televisivas de cierto éxito como la guapa Amaia Salamanca (la Cata de "Sin tetas...") y Mario Casas ("Física y Química"...).
Menos mal que esta película la he visto, aunque de baja calidad, por cortesía de la mula porque sería una lástima gastarse 6 euros en el cine para verla. La película es mala de cojones y la verdad es que no sé si me estoy haciendo mayor, pero las bromas que hacen no me parecen nada divertidas. Para más males dicen que se van a Oxford y han sido tan cretinos que han rodado en Madrid y Gijón en vez de mudarse hasta aquí. No creo que cueste tan caro rodar en Oxford. Tienen el precedente del año pasado de Alex de la Iglesia que lo hizo y no creo que costase tanto.
Es el acertado debut en la dirección de Fernando González Molina que ha reventado las taquillas españolas. Mario Casas ha hecho doblete estos meses con la película de Albacete-Menkes y ésta, demostrando que es una de las jóvenes promesas del cine español.
Tenemos humor del malo en una película hecha con palitos y cañicas que bien podría ser el episodio piloto de una nueva serie de Antena 3. La salvan, para mi gusto, pequeñas intervenciones como la de Loles León, en su tónica habitual de verdulera.
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